Energía Térmica
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La energía solar térmica es aquella que aprovecha la energía que nos llega del sol en forma de radiación, y la transforma en energía térmica mediante el uso de colectores o captadores solares (paneles solares).
Desarrollamos soluciones innovadoras para aprovechar la energía solar en soluciones térmicas como sistemas de calefacción o sistema de deshidratación y cocción.
Los paneles solares térmicos para calentar aire, tienen diversos propósitos: aportar aire seco y des-humidificar (sin llegar a crear ambientes resecos), ventilar con aire fresco y nuevo del exterior y aportar calor para ahorrar en la calefacción.
Empleamos la energía solar térmica para calentar el agua de las viviendas además de otros usos, como los sistemas de calefacción o refrigeración. O algunos procesos de industrialización que necesitan calor, como deshidratación de alimentos, des humidificación, además la desinfección o la pasteurización.
Tipos de Sistemas
- SKID Móvil – Calentador Aire
- SKID Móvil – Calentador Aire – Agua
- Sistema deshumidificar / Deshidratador
- Sistema de Calefacción.
Calentador de Agua
Calentador de Aire
Los paneles solares térmicos para calentar aire, tienen diversos propósitos: aportar aire seco y des-humidificar (sin llegar a crear ambientes resecos), ventilar con aire fresco y nuevo del exterior y aportar calor para ahorrar en la calefacción.
Sistema de Calefacción
La calefacción solar es la forma más barata de calentar su casa, nave o cualquier otro local.
El funcionamiento de la calefacción solar es sencillo, concentran la energía del sol calentando el aire en su interior, una vez caliente con un pequeño ventilador activado por un pequeño panel solar introduce el aire caliente en la estancia.
Los paneles para calefacción solar están fabricados en diferentes tamaños para diferentes tamaños de las habitaciones.
Sistema deshumidificar / Deshidratador
Los sistemas de secado solar son soluciones innovadoras, recomendado para deshidratado o secado diario de alimento húmedo que sobrepase los 250 kg*.
se aplican para todo tipo de alimentos, frutas, verduras y granos por medio de la energía solar como fuente básica de calor; sin usar combustibles fósiles que desprenden dióxido de carbono que en algunos casos afecta el sabor, color, olor y pérdida de nutrientes de los alimentos.